Podrá George Floyd ser
el gran elector estadounidense?
Carlos Vera Quintana
Internacionalista
Junio 2 de 2020
La lucha por los Derechos Civiles en EEUU se vuelve una potente arma electoral a raíz del asesinato de George Floyd a manos de los policías Derek Chauvin (quien puso su rodilla encima), Thomas Lane, J.A. Kueng y Tou Thoa.
El martes de 3 de noviembre de 2020 que se efectúen las elecciones, la situación del país estadounidense puede cambiar si se conjugan ciertas situaciones importantes.
Analicemos algunas de las cifras de las elecciones del 2016 en las cuales Trump resultó ganador contra Clinton en los colegios electorales (304-227) aunque perdió en el voto popular por 2.8 millones de votos.
En cuanto al voto popular (que elige a los miembros del colegio electoral):
Datos de las elecciones 2016
Población 324 289 210
Hab. inscritos 231 556 622
Votantes 137 053 916
Eso es más del 40% de ausentismo. Los datos indican que los votantes blancos representaron el 70% del electorado en las elecciones de ese año.
Sobre algunas de las minorías, la población afro estadounidense componen el 16 %, en tanto que los hispanos son un 18% de la población total.
Los datos de las elecciones del 2016 nos dejan alguna información precisa para analizar:
- Trump ya era popular entre los blancos. La victoria electoral de Trump 2016 fue en gran parte gracias a su éxito entre a votantes blancos. Un 58% eligió al republicano contra un 37% que eligió a Clinton.
- Trump ya era impopular entre los negros. Solo un 8% de los votantes le dio su apoyo, frente un 88% que votó por Clinton.
- Los 4 policías involucrados eran hombres. Un 53% de votantes masculinos optaron por presidente electo frente a un 41% que lo hizo por Hillary Clinton.
- El 53% de las personas mayores de 65 años eligió a Trump frente a un 45% de Clinton.
- El 55% de las personas de entre 18 y 29 años votó por Clinton frente al 37% que votó por Trump.
Los contrincantes de Trump en las próximas elecciones podrìan ser (alguno es parte de su propia estrategia de resaltar valores y de victimizarse)
- La economía de los EEUU afectada por la pandemia que de acuerdo a analistas ha hecho repuntar la candidatura demócrata.
- Los enemigos como China (que Trump usa hábilmente para ganar adeptos nacionalistas) que podrían finalmente influir en sus intenciones de reelección. Y el más importante,
- La posibilidad de las minorías para ejercer un voto decisivo si deja su enorme ausentismo.
Sin embargo no se debe perder de vista a los adultos mayores blancos muy conservadores y temerosos que pueden dudar ante el vandalismo y repuntar a reforzar a Trump, así como una campaña electoral aún en desarrollo donde más de una vez Trump y su equipo han demostrado habilidad y recursos, no todos éticos ni legítimos, para hacerse con la mayoría de los colegios electorales.
Con votaciones populares estrechas en la mayoría de Estados, con Estados pendulares en su comportamiento entre republicanos y demócratas y con un movimiento civil que puede tornarse decisivo, sin duda la toma de conciencia a la que llama el hermano del asesinado a sus hermanos de raza y simpatizantes, podrá lograr que el triunfo demócrata se alcance en las elecciones de noviembre próximo y más aún si las protestas aumentan y la represión, como ya lo ha anunciado el mismo Trump, sube de tono desencadenando situaciones imprevisibles. A este escenario se suman las presiones a la justicia estadounidense cuyos resultados podría no dejar satisfechos a muchos, pues los cargos presentados contra los policías asesinos son mejores frente a la magnitud de los hechos.
Así las cosas, 2020 puede marcar el resurgir de las minorías estadounidenses, si estas se interesan por participar más en las elecciones y en la política de su país, antes que por solamente protestar ocasionalmente cuando el sistema falla.
Así las cosas, 2020 puede marcar el resurgir de las minorías estadounidenses, si estas se interesan por participar más en las elecciones y en la política de su país, antes que por solamente protestar ocasionalmente cuando el sistema falla.
