martes, 8 de diciembre de 2015

El péndulo

Rodrigo Borja (1) en su Enciclopedia de la Política describe la Ley del Péndulo:
"Desde la perspectiva mecánica, el péndulo es un cuerpo grave que oscila en vaivén, suspendido de un punto por un hilo o una varilla. Se utiliza la expresión “ley del péndulo”para señalar las oscilaciones que se producen en las preferencias políticas y electorales de los pueblos. Unas veces votan por la izquierda y otras por la derecha, en un vaivén que tiene un cierto ritmo y regularidad —e, incluso, una cierta previsibilidad— en los países que carecen de partidos políticos hegemónicos. En los Estados Unidos, por ejemplo, suelen triunfar alternadamente demócratas y republicanos. Lo mismo ocurría en los países nórdicos de Europa con los socialdemócratas y los conservadores, antes de que se rompiera el bipartidismo. Es el imperio de la llamada ley del péndulo. Cansados o desilusionados de un líder o de un partido en el poder, los pueblos buscan en las fuerzas de oposición la opción alternativa. Así se produce el movimiento pendular" (2)
La realidad mundial y latinoamericana demuestra la validez de esta Ley. La pregunta que nos hacemos es si sus causas son naturales o impuestas. Es decir, la situación de cansancio o desilusión descrita por Borja, es por una tendencia natural del ser humano, una consecuencia de la necesidad de alternancia, se refiere a fallas normales de todo proceso, grupo o persona, o son más bien situaciones inducidas por terceros para mantener su posición y el Statu Quo?.

Como es posible que en sociedades que han llegado a cierto nivel de homogeneidad, estas oscilaciones pendulares sean más ordenadas y como indica Borja hasta previsibles? Podemos hablar de una Ley del péndulo forzado?

La realidad internacional de escenario geopolítico evidencia:
  1. En sociedades homogéneas el péndulo oscila con previsibilidad y de un modo ordenado. Así está diseñado el sistema y les funciona bien. El péndulo oscila en una franja moderada y bien limitada. Es posible que de vez en cuando irrumpa un actor o acción no prevista que altera este escenario deteniendo el movimiento pendular o incluso llevándolo contra corriente más hacia el extremo en el cual se encuentra al momento.
  2. En sociedades muy heterogéneas el péndulo oscila sin previsibilidad en escenarios normalmente de violencia política, económica y social. Los actores internos se ubican en los extremos del péndulo, que nunca se encuentran en el mismo lugar. No existe un movimiento pendular organizado, ni dentro de una franja establecida; y tan fácil como rápidamente, se puede pasar de un extremo al opuesto o al radicalmente opuesto. No existe una periodicidad predecible, lo que quiere decir que el péndulo puede iniciar su vaivén en cualquier momento y hasta regresar al punto de origen sin terminar su oscilación, igual en cualquier momento, ocasionando inestabilidad política, social y económica de décadas, que hacen añorar extrañas y hasta tiránicas situaciones.
El segundo caso, en el cual se ubica Latinoamérica, es apropiado para la intervención de terceros que forzan mantener o soltar el péndulo en base a sus propios intereses, motivando de modo artificial el cansancio o la desmotivación. Todo está previsto para ellos pero no para quienes viven la oscilación, es decir los ciudadanos.

En este escenario, por acciones, omisiones de quienes gobiernan o por el trabajo de los opositores, se generan condiciones para el movimiento pendular hacia el otro extremo y que incluyen:
  • Se generan o reviven grupos políticos de oposición. Se los arma social, económica o bélicamente, y financia para forzar la oscilación del péndulo.
  • Los actores internos se refuerzan y son quienes actúan acompañados por mercenarios de todo tipo y sus medios de comunicación aliados.
  • Los compromisos adquiridos para provocar la oscilación, tienen que cumplirse a cualquier costo. Hay que pagar el precio de los financistas.
  • Se crean sinergias regionales, por bloques de países o grupos que comparten el nuevo Statu Quo y refuerzan ante el ciudadano la validez o bondades de la tendencia en la cual se vivirá en adelante.
Es posible que a los actores motivadores (agentes geopolíticos externos) se les vaya de las manos, el control de los actores internos y sus acciones lo cual obligará a acciones directas o indirectas para retomar el control y evitar que los competidores geopolíticos se hagan del mismo. En estas condiciones, se atacará la parte más vulnerable del ciudadano (percepciones y realidades sobre seguridad, educación, corrupción, etc.) y crearán las condiciones para la nueva posición del péndulo que seguirá beneficiando a los mismos o a quienes se hagan con el control y así la Ley del péndulo igual se cumple a la espera del momento adecuado para revertir su movimiento.

En estos casos, la ley del péndulo, no es solamente un saludable movimiento natural. Es adicionalmente, una necesidad y consecuencia de las acciones de actores hegemónicos geopolíticos, que a través de cualquier medio, exacerban con técnicas y estrategias perfectamente estudiadas, el ambiente ciudadano a controlar, para que termine pidiendo o forzando un cambio que, posiblemente a quienes menos beneficiará, es a ellos mismos.

Estas estrategias incluyen:
  • Promover la inseguridad a través de ataques internos o externos, de tipo "terroristas" o de índole similar, que llevarán a los ciudadanos a elegir opciones que identifiquen como adecuadas para volver a su estado de confort.  
  • Promover el descontento a través de los medios de comunicación. Maximizando todo lo adverso y minimizando o invisibilizando lo positivo de los mandatarios de turno.
  • Alimentando el ego o forzando a errores a los mandatarios para que intenten perpetuarse, yerren en base a su codicia o percepción de impunidad total, se embarquen en asociaciones ilícitas o cometan cualquier acción que justifique el recambio y hasta las intervenciones.
  • Forzando por cualquier medio, situaciones sociales o económicas que alimenten el desprestigio del gobierno y la opción de la oposición como tabla de salvación.
Hasta ahora analizamos CÓMO.

Pasemos a analizar el POR QUÉ: La respuesta en parte ya la dimos antes y es en definitiva mantener el orden mundial, de posiciones y privilegios de unos sobre otros. En esta motivación también existe un péndulo pues cuando la industria armamentista ve decaer sus ventas, es hora de promover conflictos locales, tomas violentas del poder, revoluciones armadas, guerras civiles y enfrentamientos focalizados, por motivaciones diversas, sea por el aparecimiento de nuevos recursos naturales, la salida de cauce de un líder, las alianzas peligrosas para los hegemones, o el aparecimiento de nuevas condiciones que forzan el cambio que deberá entonces programarse o provocarse por los dominantes basados en cualquier pretexto real o ficticio, desde la amenaza para la democracia y las libertades, hasta los delitos de odio o religiosos, o los excesos de un grupo sobre otro. Cualquier pretexto será válido para justificar la intervención directa o indirecta.

En respuesta a estas situaciones provocadas, nosotros los no homogéneos, debemos ser capaces de motivar nuestros propios cambios, entendiendo que no necesitamos, ni nos merecemos, gobiernos populistas de cualquier tendencia, tiranos, garrote y zanahorias , corrupción e inestabilidad permanente.

La alternancia y los límites del poder deben ser la vía y la independencia real de funciones la forma, para llegar a contar con un Estado Responsable en el cual se reconozca la validez de ser parte del sistema, pagando impuestos, cumpliendo todas las normas por exigentes que sean, con la capacidad de cuestionar al poder entendiendo que éste es temporal y una oportunidad de servicio con responsabilidad, donde se pueda identificar a quien infringe la Ley, sea ciudadano o funcionario, para que responda por ello sin diluir sus acciones u omisiones en la Institución, la masa o en el nadismo de la burocracia. 

Que no nos siga ocurriendo que sigamos manejados por intereses de terceros, exige mayor homogeneidad social, educativa y política. Pensamiento crítico con y ante los medios de comunicación. Consecuencia, para que no tengamos a líderes hablando de los beneficios de lo social y los sacrificios para lograrlo, desde lujosas propiedades, con decenas de asesores a su servicio, desconociendo los procesos que los llevaron al poder, para lo cual muchas veces sólo se necesitó ser "orgánico", y conciencia de que nosotros mismos somos los únicos capaces de cambiarnos y cambiar nuestro entorno.

Principalmente los ciudadanos debemos entender que nada es gratis. Finalmente todo aquello que recibimos en forma de beneficios sociales, no sustentables, termina siendo pagado en cuotas demasiado largas de tiranía, despotismo, crisis o disminución de nuestras libertades, derechos e individualidad: Ahí está la respuesta a la realidad nacional en la cual no nos explicamos por qué si un líder, un modelo económico, un mercado o una revolución es tan bueno, buscamos el constante cambio?. A cada buena escuela, debe seguirle una pensión diferenciada, a cada carretera un peaje para mantenimiento, a cada servicio un costo que refleje la realidad social y económica y a cada subsidio el aporte de quienes más posibilidades económicas tienen y que deberían ser igualmente los que más conciencia social tengan. Todo en un ambiente de reciprocidad Estado-Ciudadano.

La Democracia Directa con el apoyo de la tecnología y el fortalecimiento de las capacidades ciudadanas, los sorteos para reemplazar a los poco meritorios concursos de oposición y méritos, y el incremento de oportunidades sociales para todos, son el ambiente necesario para el crecimiento social y así lograr que el péndulo finalmente sirva para apoyar a que por muy bueno que sea un sistema, estemos permanentemente en la tarea de buscar mejores opciones.

(1)19 de junio de 1935 (edad 80), Quito. Ex presidente del Ecuador por la Izquierda Democrática, del 10 de agosto de 1988 al 10 de agosto de 1992. 
(2)http://www.enciclopediadelapolitica.org/Default.aspx?i=&por=l&idind=894&termino=              Consultado 07-12-2015